lunes, 18 de octubre de 2010

Soy metálico...

Después de 15 años viviendo en Madrid y un par de intentos fallidos, por fin visitamos el Jardín Botánico. Es increíble que por solo 2,50€ puedas pasar la tarde en ese remanso de paz situado en el corazón de la ciudad. Todo el mundo sabe que la naturaleza no es lo mío y que, con la evidente excepción del olivo, no se diferenciar una encina de un alcornoque, pero lo que si se es apreciar y disfrutar las cosas bellas. Después de contemplar la colección de dalias, emblema de la Sociedad de Amigos del Real Jardín Botánico, llegamos al Paseo de Carlos III, donde se expone la muestra “Imágenes de un siglo en España: una mirada a la historia y la vida cotidiana”, que reúne un centenar de fotografías del archivo fotográfico de la agencia EFE. Se trata de estampas históricas y de personajes célebres intercaladas con otras de la vida cotidiana que muestran los profundos cambios sufridos en España en los 114 años que transcurren entre la primera y la última instantánea.
Al salir del invernadero fiché el encantador merendero para volver otro día, con tentempié incluido, y apuntarnos a algunos de los talleres familiares que organizan.



2 comentarios:

  1. ¡Bienvenida a la blogosfera!

    La visita al botánico es una de las tantas asignaturas pendientes que tengo con Madrid. Eso sí, me gustaría poder ir con un forestal o similar, que además de disfrutar de la variedad de plantas desconocidas, te hace la visita más interesante aún :-)

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  2. Gracias por estrenar el blog!
    Espero que no tardes 15 años como yo en visitarlo! Entra en la web y verás las visitas guiadas que ofrecen...

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